NO LE QUITES EL "OJO" (NOTICIAS)
Fecha de publicación: 04/08/06
El pasado miércoles 02 de agosto, los trabajadores y cañicultores, con el apoyo de la comunidad en general que se localiza en las adyacencias del Central Azucarero, “Santa Clara” en el municipio Veroes del Estado Yaracuy, alzaron su voz de protesta ante la actitud hostil y antiobrera que afecta a las familias que dependen de este centro de trabajo.
Denunciaron los trabajadores que se encuentran en el Comité de Conflicto, que los dueños y patronos de la empresa, pretenden mantenerla cerrada, con el firme propósito de coartar la libertad a los trabajadores de constituir un Sindicato Bolivariano como instrumento de defensa de sus derechos reivindicativos, sociales y laborales, tal cual, lo establece nuestra Carta Magna en su Art.95, y la Ley Orgánica del Trabajo, vulnerando así la voluntad sagrada de los trabajadores.
Fecha de publicación: 04/08/06Así lo dio a conocer Edgardo Sánchez, consultor Jurídico de la UEMAT-Yaracuy, este miércoles 2 de agosto en las instalaciones de la Comisaría de Marín, argumentando que la manifestación pacifica se realizó en el distribuidor de El Peñón, en Marín alrededor de las diez de la mañana, en la carretera Panamericana con motivo al cierre del central Santa Clara y la necesidad de los cañicultores en poner su siembra de caña para moler en la producción de azúcar Reidi Mendez representante de los cañicultores aseveró que los campesinos de veroes quienes fueron victimas de los embates violentos de los cuerpos policiales pidieron la destitución del Comisario Rafael Azuaje, comandante del Iapey y responsable de los acontecimientos y de victimas como Alexis Escalona gravemente herido. El Secretario de Seguridad Ciudadana Oscar Vaquero con quien el comisario Azuaje se estuvo poniendo en contacto en esos momentos estaría implicado en los hechos. El Consultor Juridico del MAT explicó que los detenidos y torturados por los cuerpos de seguridad responden a los nombres de Juan José Quintero, Moisés Prieto, Eladio Rengifo quienes fueron detenidos y procesados a la orden del fiscal Rafael Pérez Díaz, fiscal de guardia para el momento ,siendo estas personas llevadas como delincuentes, esposados en la jaula de la policía a la Comisaría de Marín donde fueron torturados con las peinillas y con las cachas de las armas que portaban los policías, tratando de incitar a que no pusieran ninguna denuncia.
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